A la concluyente afirmaciòn de un acadèmico: “… la democracia en Venezuela se apagò en 1999…”
Rafael Rivero Muǹoz
Caracas, 14/08/2023
“… La muerte de la democracia no es probable que sea un asesinato en una emboscada. Será una extinción lenta mediante apatía, indiferencia y desnutrición…”
Robert Maynard Hutchins (1899-1977)
En ciento dieciseis minutos una destacada exposiciòn del catedràtico Asdrùbal Aguiar Aranguren, sobre el còmo expresos, dirigidos y eficientes desempeǹos polìticos intra y extrafronteras, estatales y no estalales, se impusieron por sobre una, por lo visto, polìticamente inerte Venezuela hasta aplastarla, y para mantenerla hoy, fèrreamente anclada a intereses de todo gènero incluidos los delictivos, expresamente contrarios a cualesquiera fueren expresiones materiales de una autònoma comunidad humana asentada en un territorio soberano, Venezuela, operante en el concierto de ciento noventa y seis Estados-naciòn del mundo: Y còmo llegamos allì?
En este importante foro en comento, de suyo trascendente para cualquier inexperto venezolano de a pie que haya pretendido y que pretenda aùn entender y mas que ello, explicarse para explicar, las seis dècadas polìticas que preceden a lo que queda en el presente de una Venezuela.
Un conversatorio de ciento dieciseis ininterrumpidos minutos por el canal colombiano Movimiento Civico, entre el promotor Carlos Alonso Lucio Lopez y el citado y reconocido estudioso experto en polìtica y catedràtico venezolano https://youtu.be/n18_UApTGhY
Y nos topamos allì, con las acadèmicas realidades derivadas de la polìtica a la venezolana que por aǹos, en mùltiples apuntes y notas publicadas, empìricamente hemos venido comentando como los fundamentos pràcticos que abrieron una brecha para la destrucciòn de Venezuela como paìs otrora soberano, y ya hasta con peligro para la vigencia del mismo vocablo venezolano como gentilicio de sus naturales; todo en un juego de intereses polìticos y no polìticos en el lapso de estas seis precedentes dècadas a revisar.
Intentando comenzar por el principio de este fin, tomemos para ese arranque la indiscutible aseveraciòn con la que el reconocido experto venezolano cierra este intercambio de opiniones; el acadèmico concluye tajante cerrando su docta intervenciòn con las dos indiscutibles determinantes con las que titulamos esta nota: A) desmaterializada y B) la democracia en Venezuela se apagò en 1999.
No se pretende en esta obligada pero empìrica apreciaciòn de un ciudadano de a pie, modificar y mucho menos refutar en lo absoluto, ninguno de los argumentos y pareceres adelantados por ambos expertos contertulios, tanto sea sobre los comentados y eslabonados eventos de la polìtica a la venezolana que tanto llevaron por ese camino de la dematerializaciòn a este definitivo aplastamiento de Venezuela por Cuba, como a los eventuales referentes de aplicar o no, a la actual situaciòn en curso en Colombia.
Solo se pretende dar continuidad argumental desde este vigente empirismo propio al no experto, aunque si observador y anotador de algunos eventos que escuchò, viò y viviò sobre el terreno para intentar sustentar, sobre esos datos tècnicos ahora difundidos por el experto, lo que por dècadas y a partir de los ochenta del siglo pasado, se ha venido sosteniendo en mùltiples notas sobre los precedentes y determinantes de esta tragedia polìtica venezolana.
No tanto y en funciòn de una bùsqueda e identidad de culpables si no fuere de responsables, para lo cual no se està calificado, pero si para abordar el arriesgado ejercicio de intentar entender primero y luego hacer entender, còmo llegamos a esto; y eventualmente si fuere el caso, que unas nuevas emergentes generaciones de polìticos no pretendan seguir por ese mismo sempiterno curso pautado que, haciendo siempre lo mismo, eventualmente y de alguna màgica forma intenten construir resultados distintos a los conocidos y en cualesquiera fueren las pretensiones por recuperar la vida polìtica en Venezuela; eso, si es que acaso en este posmodernismo de las tres P -populismo, polarizaciòn y posverdad- en el dominante curso de la actual polìtica, se brindare alguna vez una ventana para pretenderlo.
Comencemos entonces por el principio para este comentario y primer punto a tocar, resulta indispensable recordar aquel tiempo polìtico; el momento en que en polìtica una pretensiòn de democracia hace irrupciòn en una Venezuela eminentemente rural y cuando sobre la totalidad de su territorio, a tenor, ya se habìa consolidado la soberanìa de una Repùblica a partir de la victoria en ùltima batalla contra caudillos locales, marcando el final definitivo para los hombres a caballo y sus ejèrcitos privados regionales y sobre ello, desde un gobierno centralizado se habìa organizado la Hacienda Pùblica comenzando por pagar toda la deuda externa, se habìa fundado un ejèrcito profesional y unido por carreteras pavimentadas, el territorio de esa emergente Repùblica.
Saltemos por economìa de espacio en el comentario, desde los acuerdos de Nueva York de diciembre de 1957, refrendados luego en 1958 en el llamado Pacto de Punto Fijo, a un listado de doce de las indiscutibles trascendentes decisiones polìticas que, en programada o no secuencia, fueron preparadas, tomadas e implementadas a partir de la huida del paìs del presidente en funciones Marcos Evangelista Marcos Pèrez Jimènez, pero que, sin de crucial importancia a considerar y que por lo visto, se han silenciado y siguen silenciando como hemos podido entender en estas consideraciones acadèmicas en comento.
- Derivado de los acuerdos de Nueva York y del firmado Pacto de Punto Fijo, quedarìa instaurada en el paìs la democracia segùn los partidos firmantes; una particular democracia a la venezolana y a la cual definirìa Arturo Uslar Pietri, como democracia sin oposiciòn y que se caracterizò su particularidad en la definiciòn de Juan Carlos Rey como un “Sistema Populista de Conciliaciòn de Èlites”; veamos esa particularidad en trascendentes iniciales decisiones polìticas preparadas y tomadas para su articulaciòn y funcionamiento, hasta la fecha en que, ahora segùn el experto catedràtico Asdrùbal Aguiar Aranguren, ubica ese inicio de lo que el denomina la desmaterializaciòn: 1989
- Ejecutivamente se elimina por decreto tanto la Seguridad Nacional, servicio de policìa civil responsable por ejecutorias en materia de seguridad de Estado, investigaciòn criminal y seguridad pùblica, como el cuerpo de policia civil uniformada encargada de la ejecuciòn material de las medidas y operaciones civiles de policìa.
- Una organizada poblada asalta sin resistencia el viejo edificio de la Creole ubicado en la Plaza Morelos de Caracas, donde funcionaba el cuartel central de la Seguridad Nacional; se despliegan e intervienen unidades del ejèrcito nacional conteniendo la poblada, la sacan de las instalaciones y de seguida todos y cada uno de los archivos de ese servicio de policìa, el Archivo Criminal, son decomisados, desplazados de su ubicaciòn y cargados en mùltiples camiones del ejèrcito para trasladarlos, primero a instalaciones militares, luego a las instalaciones fìsicas del partido AD y con posterioridad, segùn luego se conocerà, serìan destruidos.
- Todas las unidades de policìa civil uniformada son desarmadas y replegadas a sus cuarteles, reuniformadas como soldados y, bajo mando de oficiales militares subalternos, son desplegadas para la custodia de instalaciones oficiales y atender las situaciones de orden pùblico en Caracas.
- Se intenta crear por decreto la Criminològica para ràpidamente sustituir a la Seguridad Nacional, el designado director Evelio Cubillàn, no se juramenta al negarse a ejecutar las tareas asignadas de una calificada como policìa polìtica.
- Se decide dividir en dos el Còdigo Penal vigente en delitos comunes y delitos polìticos; para la atenciòn de la primera secciòn se decreta la fundaciòn del Cuerpo Tècnico de Policìa Judicial (en adelante PTJ) designando como director al abogado Rodrolfo Plaza Màrquez; para la segunda se funda por decreto la Direcciòn General de Policìa (en adelante DIGEPOL) designando como director al militante de AD Erasto Fernàndez.
- Por disposiciòn ejecutiva y adscrita a la DIGEPOL pero con rendiciòn de cuenta directa al vice Ministro de Relaciones Interiores, se crea la Divisiòn de Contrainteligencia y se designa como jefe al cubano Orlando Sacramento de Jesùs Garcìa Vàzquez.
- Se inicia un ràpido proceso de entrada al paìs, nacionalizaciòn express e incorporaciòn directa a la Divisiòn de Contrainteligencia, de un significativo grupo de supuestos expertos en Seguridad de Estado entrenados por la CIA y los Green Beret norteamericanos, un expresamente seleccionado lote de naturales de Cuba, entre los que son de mencionar: Miguel Garcìa Montalvo alias “Mike Cabot”, Ricardo Morales Navarrete alias “Mono Morales”, Luis Clemente Faustino Posada Carriles alias “Bamby”, Lazaro Rogelio Ugarte y de Breselau alias “Triple Cedulado”.
- De forma no hecha pùblica, es designado por el Ejecutivo para el control de los desempeǹos de Tribunales y de Fiscalìa, el abogado venezolano David Morales Bello y allì se inciarìan las actividades de lo que luego se conocerìa como “La Tribu de David”.
- El natural de Cuba Luis del Pino Tous, redacta el texto de lo que luego se conocerìa como Decreto 599 y propone al Ejecutivo por òrgano del Ministerio de Relaciones Interiores la creaciòn del servicio privado de vigilancia, protecciòn y transporte de valores, firmado ese primer decreto, con una franquicia de la empesa de origen cubano Servicio Panamericano de Protecciòn, funda ese servicio privado en Caracas el 15/10/1958; luego por razones de orden tècnico en los procedimientos administrativos, el mismo autor debe redactar una modificaciòn del decreto original y el Ejecutivo sustituirà el 599 poniendo en vigencia el Decreto 699.
- Una vez ganadas las elecciones por Rafael Antonio Caldera Rodrìguez, es designado para atender los asunto de seguridad el abogado Remberto Uzcàtegui Bruzual a quien el Ministro de Interiores en funciones Reinaldo Leandro Mora, hace entrega tanto de las instalaciones del complejo de oficinas La Palomera edificado en la azotea del viejo edificio de la esquina de Carmelitas en Caracas, donde funcionaba el Ministerio, como de fondos de la Partda Secreta y a partir de ese momento, se inician los contactos polìticos con guerrilleros y operadores polìticos de los alzados en armas para dar comienzo a lo que luego serìa el mascaron de proa de ese perìodo, la pasificaciòn; entre los primeros llamados a La Palomera, estuvo el cubano Orlando Garcìa Vàzquez con quien se negocia acuerdo en los siguientes tèrminos: 1. A cambio de que ninguno de los intereses de Venezuela y sus representantes en cualquiera fuere el escenario, dentro o fuera del territorio de Venezuela, no sea objeto de ningùn ataque armado o acto de terrorismo; 2. El gobierno le garantiza a Orlando Garcìa Vàzquez y a todo el equipo bajo su mando y conducciòn, mantener el flujo de fondos econòmicos que les permitan continuar sin alteraciòn las tareas de seguridad que venìan desempeǹando, incluido, se les mantedrìan credenciales oficiales, vehìculos, armamento, instalaciones fìsicas de oficinas y bases de operaciòn, mas los enlaces con los servicios de seguridad
- Por expresa decisiòn presidencial, los abogados David Morales Bello jefe de la Tribu de David y Juan Martìn Echeverrìa Prices Ministro de Justicia en funciones, son destacados en misiòn especial de la Presidencia de la Repùblica, para realizar todas las gestiones y acuerdos necesarios en todos y cada uno de los paìses en la ruta del vuelo CA-455 de Cubana de Aviaciòn, hasta traer a la jurisdicciòn Penal de Venezuela todas y cada una de las diligencias, actuaciones y decisiones, para la investigaciòn criminal y juzgamiento de ese caso de terrorismo, con la instalaciòn y secuencia de detonaciones de dos artefactos explosivos activados durante el final vuelo regular de la aeronave de pasajeros.
Obligado es para entender còmo la particular democracia a la venezolana, por razones polìticas o no, se iniciò desmontando la Repùblica y por una u otra fuere la razòn comenzò la desmaterializaciòn de la polìtica, para lo cual desde esta muy limitada òptica de seguridad, deberemos citar un personaje central de toda esta praxis de 14.600 continuados dìas de polìtica por otros medios dirigida desde La Habana, a la luz de cualquiera que desde la Academia o cualquiera otra fuere la posiciòn, se atreviera a verlas en sus pùblicas evidentes manifestaciones materiales, registrarlas y comentadas:
De trascendente importancia son algunos detalles sobre el citado cubano Orlando Sacramento de Jesùs Garcìa Vàzquez.
Nacido en La Habana 1927 a los doce años inicia hasta culminar bachillerato en USA donde se enlistó y peleò en la WWII, regresa a Cuba 1946 donde gana fama de inmediato con el reguero de sangre en combates a tiros en La Habana; en 1948 se incorporó a la Legión del Caribe y es enviado a Costa Rica en apoyò a Pepe Figueres, luego sigue tareas en la organización revolucionaria Unión Insurreccional Revolucionaria (URI), donde conociò y trabajò codo a codo con Fidel Castro Ruz.
En 1949 ya està registrado en el Archivo Criminal de la Policìa de Cuba como ganster de la URI, luego de la Triple A de Aureliano Sànchez Arango; en julio de 1953 un posible “Falso Positivo” con un presunto atentado ordenado por Rafael Leonidas Trujillo contra Ròmulo Betancourt exilado y residente en Costa Rica, a requerimiento de Carlos Andrès Pèrez y en compaǹìa de Raul Hernàndez Rodrìguez alias “El Patato” y luego de afirmar haber identificado los sicarios y asì, embaucan a dos paisanos antiguos compaǹeros en actividades terroristas, Manuel Orive Fernàndez y Jesùs Gonzàlez Rodrìguez alias “Panaderito”, los llevan bajo engaǹo a la ruta a la hacienda de Pepe Figueres hasta el borde de un volcan y mientras “Panaderito” los distrae Garcìa Vàzquez les dispara por la espalda a la cabeza, los desnudan y los lanzan al fondo; en 1954 es acusado del asesinato de ex-ministro Alejo Cossio del Pino y Biazo Prendes; participa en el atentado contra el presidente de Cuba.
Dentro de ese juego polìtico-criminal en El Caribe sería uno de los más activos operadores de Fidel Castro Ruz en los acuerdos y desacuerdos secretos con Rafael Leónidas Trujillo; de regreso a Costa Rica es designado por Pepe Figueres capitàn de la Guardia Presidencial y en 1957, otro “Falso Positivo” con la captura de Herminio Díaz, Jesús González Cartas y un piloto apodado “El Francés”, repite la dosis bajo los cargos de ingresar al país para matar a Pepe Figueres por órdenes de Trujillo.
De un documento desclasificado de cuatro pàginas emitido por SAC Miami (105-1729) recibido por director del FBI (109-12-228), con el apunte: “CIA has not objection to declassification and/or release of CIA information in this document Dec 5 1969”, cinco extractos:
- “… Miembro de la policìa secreta de Cuba (1948-52), luego opositor a Fulgecio Batista regimen en Cuba y de Trujillo en Repùblica Dominicana. Sirviò con Fidel Castro como attache de la Embajada de Cuba en Costa Rica hasta marzo 1960…
- … Se trasladò a Venezuela obteniendo esa nacionalidad en 1962 sirviendo en el Ministerio de Relaciones Exteriores y trabajando para DIGEPOL. Se reportò informaciòn como guardia personal del presidente Betancourt y de Raul Leoni de Venezuela, tanto como para Josè Figueres de Costa Rica…
- … 1960 informacion lo seǹala como agente de Castro en Miami…
- … Emplazado en alto cargo en el gobierno de Venezuela y seǹalado como anti-comunista…
- … El servicio mantiene contacto con Lelie Lloyd Andrews hijastra de Garcìa quien està en proceso de formaciòn de fuente de informaciòn de Venezuela y podrà brindar informaciòn sobre los ulteriores viajes de Garcia a Miami…”
De las doce decisiones polìticas reseǹadas y de las conocidas actividades criminales del cubano Orlando Sacramento de Jesùs Garcìa Vàzquez, solo es posible una sustentable hipòtesis sobre todo el proceso bèlico contra Venezuela en ese continuado lapso de 14.600 dìas: Fidel Castro desde la comodidad de su Despacho en La Habana Cuba y en la ejecuciòn de su anunciada empresa bèlica para la expansiòn de su revoluciòn al resto de Amèrica Latina (Caracas, 26/01/1959), desarrollò
y usò capacidad polìtica suficiente para manejar directamente todo el proceso de operaciones bèlicas contra Venezuela, incluidos los desembarcos de fuerzas militares expedicionarias y los alzamientos militares de Barcelona y de Puerto Cabello, mientras a la vez y en forma concomitante, indirectamente por la vìa de Orlando Garcìa Vàzquez tuvo y uso capacidad y oportunidad para intervenir, influir y hasta dirigir los esfuerzos de los mandos superiores de las unidades de respuesta venezolanas en y para la preparaciòn, toma y ejecuciòn de las medidas de seguridad militares y policiales destinadas a la contenciòn, ataque y represiòn en y de las operaciones bèlicas que ordenaba.
El tratamiento del tema en esta extensa nota, ha sido y es desde la praxis y no tanto como oposiciòn a cualquiera sea el tratamiento teòrico, sino como complementaciòn y a la luz de la experiencia acumulada en la atenciòn a las mùltiples ejecutorias de la polìtica por otros medios de Fidel Castro y las actividades de respuesta sobre el terreno desde mando en lìnea de una organizaciòn de policìa civil no uniformada, que tanto confrontò a tiros en ciudades, carreteras de provincia y selvas venezolanas a los grupos dirigidos desde La Habana, hizo levantamientos de decenas de cadàveres producto de mùltiples enfrentamientos armados y actos terroristas, entre otras en la “Operaciòn Un Dia Un Policìa”, como en la desactivaciòn de artefactos explosivos, en su mayorìa dinamita con espoleta de hielo derivadas de los entrenamientos tècnicos, la organizaciòn mando y conducciòn de las iniciales unidades terroristas cubano-venezolanas articuladas por la organizaciòn Euskadi Ta Askatasuna (ETA).
Por cierto, entre los primeros expertos llegados a Venezuela para la organizaciòn de la modalidad bèlicas de terrorismo, estaba el vasco Felipe Fermoso Linares quien en una madrugada del pricipio de los sesenta, cuando intentaba colocar una carga de cuatro cartuchos de dinamita en la acera y a la base de la santamarìa de un comercio judìo en San Bernardino, accidentalmente activò la espoleta y volando por los aires, sus noventa kilos cayeron a quince metros de la detonaciòn, torso tripas al aire ya sin brazos ni piernas, media cabeza y cuyo levantamiento tècnico-criminal se llevò varias horas de recolecciòn de restos humanos en la calzada o colgando de àrboles, ventanas, balcones de la zona, y luego en la autòpsia, se recuperarìa la esfera de su reloj pulsera, incrustada profunda en el ventriculo derecho.
Como se podra derivar de la praxis y citando a Enrique Múgica Herzog: “… La democracia no es el silencio, es la claridad con que se exponen los problemas y la existencia de medios para resolverlos…”